Compartimos los consejos más básicos para cocinar con cerveza, qué cerveza elegir según el plato que estas creando y cuáles son las precauciones que debes tomar para obtener un platillo con un buen sabor
La cerveza puede ser un ingrediente para cocinar tus recetas y elevar el sabor de tus platillos. Compartimos algunos consejos clave para aprovechar cocinar mejor con cerveza y elegir la mejor opción según el tipo de comida que deseas preparar.
Las opciones para cocinar con cerveza no solo se reducen a pollo a la cerveza. La cerveza es muy versátil, puede usarse en sopas, guisos, adobos, salsas, vinagretas, carne roja, pescado y verduras. La cerveza también es excelente para hornear ya que la levadura es un agente leudante.
Qué cerveza combina mejor con las recetas
La cerveza que uses depende del plato que estés creando. Lo ideal es buscar el equilibrio, que el sabor de la cerveza no domine a la comida y viceversa.
Las cervezas oscuras, como las stout y las porter, suelen combinar mejor con ingredientes oscuros y fuertes como tocino, chile y chocolate. Son excelentes con carne de res y carne de caza ya que las enzimas en la cerveza son buenos ablandadores.
Las cervezas marrón y ámbar pueden brindar un sabor a galleta, nuez, caramelo y chocolate con leche, sabores complejos y tostados.
Las cervezas lagers y ligeras suelen ser mejor para cocinar con pescados y mariscos, pollo, cerdo y verduras.
Algunas cervezas pueden contener mucho lúpulo, el cual contiene ácidos que pueden agregar amargor a tus platillos. The Kitchn recomienda que al usar cerveza en adobos, salmueras, vinagretas o salsas ligeramente cocidas se debe equilibrar el sabor de la bebida.
Para contrarrestar el amargor de la cerveza pueden agregarse distintos ingredientes, un ingrediente ácido como jugo de limón, vinagre o mostaza; algo dulce, como miel o cebollas caramelizadas; o una grasa, como aceite o queso.
Cuida la reducción de la cerveza
La reducción de la cerveza, especialmente cervezas amargas y lupuladas, hace que el sabor se concentre, volviéndose más fuerte e intenso y pueda amargar demasiado la preparación.
Puedes reducir la cerveza por separado y agregar a tu sopa o guiso cerca del final de su cocción a fuego lento.
Si no sabes cuándo una cerveza puede ser buena para usar en tus recetas, hay una regla simple que The Take Out comparte: “si la cerveza es de color marrón o ámbar, no demasiado lupulada y lo suficientemente sabrosa para que la bebas, puedes cocinar con ella. Sugiere evitar cerveza que esté rancia o no sepa bien».